“Le debo todo al azar”, el nuevo fotolibro de Julieta Christofilakis

 

"Le debo todo al azar" es el primer fotolibro de Julieta Christofilakis. Relata un vínculo con un dispositivo: una cámara 35mm de medio cuadro, en la que todo es azar y juego. Dos imágenes, una pregunta y una respuesta. Una compañía. 

Nos invita a jugar, seguir recorridos, armar rompecabezas y reflexionar un poquito sobre qué es lo que elegimos registrar y por qué. Conocé más de este proyecto a continuación.

 
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¿Cómo y cuándo nació “le debo todo al azar”?

"Le debo todo al azar" nació (sin querer) con la compra de una cámara de medio cuadro. Nació en la investigación del dispositivo, de la cámara Canon Demi EE28, comprada por azar en Parque Centenario, en 2017.


La historia cuenta que yo, ansiosa, abrí mi ex cámara 35 mm en la playa para cambiar el rollo, y le entró arena. La consecuencia de esta acción fue la rotura del arrastre (y al no haber repuestos), la pérdida de mi querida Yashica Electro 35.

En la búsqueda de una nueva cámara me encontré con esta, y fue amor a primera vista.
El trabajo fue avanzando y consolidándose cuando me entregué al formato de la cámara, al juego.

 

¿El formato de medio cuadro te permitió seguir entregándote a lo azaroso? ¿Cómo?

¡Sí! El formato fue clave para el juego y el azar. Al revelar un rollo todo eran piezas sueltas, fotos buscando su par. Algunas se emparentaban solas, por azar, y otras las emparentaba yo.


La cámara es manual pero tiene muy pocas funciones, menos de 10 velocidades y un foco muy ambiguo, por lo que una nunca sabe muy bien qué es lo que está saliendo. Perdés el control de las imágenes y la cuenta de cuál queda al lado de cuál.

 
 
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¿Qué cosas te permitió lanzar la edición de bolsillo en 2019? ¿Qué aprendiste de esta primera etapa de edición?

Después de un taller que hice en el 2019 ("Mirar, Editar, Contar" en Santa Talleres) sobre fanzines, tuve ganas de materializarlo pero sabía que el trabajo no estaba terminado. De hecho, seguía haciendo fotos con esa cámara (no como ahora).


Pasé por casi 20 maquetas distintas a lo largo de estos años, y esa fue una de las pocas que se materializaron, y la única que se vendió por el 2019. Para mi fue súper importante ver cómo funcionaba el trabajo en papel, el pase de página, las imágenes sobre blanco, los tipos de papeles y tamaños. Considero muy clave pasar por instancias previas antes de lanzarse a imprimir una tirada grande.


Imprimí 20 nada más, me lo compraron mis amigxs más que nada. Quería recibir algunas devoluciones, quería ver cómo funcionaba.


¡Algunas cosas se mantienen! Cómo por ejemplo las instrucciones, los capítulos y algunas imágenes.

 
 
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¿Cuánto hay de azar en la curaduría final de este fotolibro?

La verdad que bastante poco jaja, fue visto por muchas personas y recibió muchísimas devoluciones y preguntas.


Todo este 2021 trabajé con Iara Kremer en el diseño, y tuve visionados con Julieta Escardó y Romina Resuche, además de mostrarle el libro a muchos amigxs y colegas para que me digan sus opiniones.


El azar estuvo en la construcción de las imágenes y en el proceso del libro, en muchos ejercicios de collage en los cuales me ayudaba con mazos de cartas (como el de creadores de imágenes) u oráculos (como el OCP).


En las primeras ediciones he usado dados para aproximarme a la narrativa, y todo ese proceso se ve reflejado en el libro. Pero la curaduría final final final fue muy pensada y solamente mantiene algunos caprichos.

 

Contanos un poco sobre la tapa, ¿Cómo fue el proceso de diseño? ¿Por qué esa flor?

La tapa... cómo hago para hacer un resumen corto del proceso de la tapa...


En principio la tapa fue algo que cambió muchísimo a lo largo del proceso, no como por ejemplo el título que siempre fue el mismo, nunca hubo otro. Pasó por muchísimas opciones, con letra a mano, fotos, collage, sin título… hasta que llegó a esta.


La historia es un poco rara, yo soy medio recolectora y coleccionista, por lo que el año pasado decidí comprarme un escáner y empecé a escanear "basura" que no quería tirar, o cosas que agarraba de la calle.


Un día en el 2020 (muy a pleno con el proceso del libro) revolviendo cosas encontré un sobre con flores que había dejado secar. Me puse a revisar archivo y encontré esta foto:

 
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Me dí cuenta que había recolectado una flor en 2019 y casi un año (literalmente) después, cuando ya no estaba sacando fotos con esa cámara, la encontré entre mis cosas.

En ese momento la escanee con la funda de mi almohada de fondo (que es azul) porque fue lo primero que ví y con el título a mano alzada en papelitos cortados y salió esto:

 
 
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Que fue la tapa de la última maqueta casera que hice, con fotos pegadas con cinta bifaz sobre papeles de block "el nene", cortadas con cúter y regla.

Y después con esa base, se hicieron modificaciones hasta llegar a la actual, usando la tipografía del libro y sacando elementos.

En la creación de la tapa actual también pasó algo azaroso ya que la palabra "todo" que está dada vuelta en la tapa, fue un error. No quería que esté dada vuelta pero cuando la corregí, por algún motivo no elimine la anterior, y cuando vimos todas las tapas en un visionado con Julieta Escardó, ella me dijo "a ver las tapas que descartaste" y estaba esa entre las demás.

La flor y el "todo" patas para arriba fue azar y ahora es la tapa del libro.

 

¿Cuál es tu díptico favorito de todos los que se formaron de forma azarosa? ¿Qué recordás de esos dos momentos que se juntaron?

Ay qué difícil, creo que esta:

 
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Me había ido de vacaciones. El agua me trae muchísimos recuerdos, ya que cuando me operé de la rodilla y tuve que aprender a caminar de nuevo, todo lo tuve que hacer en el agua porque el cuerpo pesa menos.

Cuando volví a mi casa llovía, y a la mañana siguiente saqué la segunda foto. Me sorprendió mucho la similitud entre el agua y las sábanas de mi cama.

 

Nos encantó la propuesta lúdica que tiene el fotolibro. Que tenga un rompecabezas nos parece un detalle hermoso ¿te inspiraste en otros proyectos o por qué la elección de este formato al estilo de "elige tu propia aventura? ¿Quiénes son tus referentes?

La propuesta lúdica de "elige tu propia aventura" nace de ver muchísimas veces el material y darme cuenta de patrones que tenían mis imágenes: la foto como declaración de amor, la colección de pies que me dí cuenta que tenía, y las fotos como auto-investigación.

Quería que lx lectorx pueda jugar con el libro como yo lo hice cuando estaba todavía creándolo: uniendo imágenes con otras y armando mis propios caminos y recorridos.

El rompecabezas surge después, ya que una gran parte del proceso de trabajo también se dió en el collage y lo quise incluir así. Un rompecabezas de un collage de muchas fotos del libro para así seguir jugando.

Referentes tengo muchísimos, desde amigxs como Mariana Papagni, íconos de la fotografía de registro y diario como Nan Goldin y fotógrafxs contemporáneos como Laurence Philomene. Aunque, a decir verdad, siempre estoy descubriendo nuevxs fotógrafxs increíbles todos los días. Para nombrar a un par que sigo y siempre vuelvo a sus trabajos podría decir: Bego Anton, Ana Mendieta, Juno Calypso, Lina Scheynius, entre otrxs.

Kent Rogowski tiene un trabajo llamado "Love = Love" que son rompecabezas, a él llegué por colegas en el proceso del armado del rompecabezas.

 
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¿Qué esperas de la persona que entra a este universo? ¿Qué pensás que puede llevarse de todas estas preguntas que conducen a más preguntas?

A decir verdad, me gustaría que el libro sea atemporal, que puedas volver a él en distintos momentos de la vida y que las respuestas de las preguntas sean otras día tras día, son preguntas sin respuesta. Que los caminos que se elijan sean otros y que siempre se puedan descubrir cosas nuevas. Que como lectorxs se imaginen otras duplas de imágenes, que quieran cambiarlo, que quieran reubicar preguntas en otro lado, que armen y desarmen el rompecabezas.

También me encantaría que se enamoren del formato de la cámara de medio cuadro tanto como yo, y poder ver muchos trabajos más con esta cámara que fue mi primer amor.

 

¿Tu proceso creativo siempre está sujeto a lo imprevisto o fue algo que quisiste experimentar en este proyecto en especial?

Mi proceso creativo por lo general está sujeto a lo imprevisto, a lo que se me aparece, al registro a modo de diario. Pero lo que me pasó fue que esta cámara me redobló la apuesta por su formato.

A principios del 2020 me empezó a pasar que había fotos que no salían cómo yo quería por las pocas decisiones que se pueden tomar sacando fotos con esa cámara (tiene muy pocas funciones).

En ese momento me compré una cámara nueva y ahí di por finalizada la producción de imágenes para este proyecto.

 
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¿Cómo y dónde podemos conseguirlo?

Actualmente se puede conseguir en mi Instagram en PREVENTA, anotándose en este formulario. Después se envía toda la información por mail! Siempre pueden escribirme a julichristofilakis@gmail.com o a le ledebotodoalazar@gnail.com :)

El libro se terminará de imprimir en JULIO/AGOSTO en AKIAN Gráfica Editora, impresión offset.

 

Ficha Técnica:

"Le debo todo al azar"

Julieta Christofilakis

Fotolibro de autorx

ISBN 978-987-86-9996-7

Impresión offset AKIAN Gráfica editora

18 x 15 cm

58 páginas

Rompecabezas 54 piezas

Primera Edición 200 ejemplares

JULIO/AGOSTO 2021

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